La Orientación Sexual se forma de la atracción sexual, romántica (emocional) y afectiva que tiene un individuo hacia otro, pudiendo ser meramente sexual pero no romántica o afectiva (simple atracción física), exclusivamente romántica pero no afectiva o sexual (solo idealizada), afectiva más no sexual ni romántica (amistad, homofílica o heterofílica) o en varias formas posibles para formar relaciones exclusivas, abiertas, temporales, casuales o permanentes, incluyendo la incapacidad de sentir atracción, formar relaciones afectivas o sentir una identidad sexogenérica.
En términos generales se habla de:
Heterosexualidad, atracción hacia personas del sexo complementario (hombre/mujer).
Homosexualidad, atracción hacia personas del mismo sexo (hombre/hombre, mujer/mujer).
Bisexualidad, atracción indistinta hacia hombres y mujeres en diferentes grados (exclusivo, preferente e indistinto).
Pansexualidad, la atracción es independiente del sexo o género de la persona (hombre, mujer, transexual, intersexual).
Demisexualidad, atracción romántica o afectiva hacia el individuo sin considerar el sexo, género o identidad de género del individuo.
Asexualidad, falta de atracción o de deseo sexual hacia los demás individuos, pudiendo ser perfectamente capaz de sostener un acto sexual o autoerótico sin sentir deseo o carecer de interés por realizarlo, pudiendo o no relacionarse con otros individuos.
En ningún caso la Orientación sexual es una patología, no es posible curar, reafirmar ni alterar, las terapias de reorientación sexual y los tratamientos de sanación de la homosexualidad no están reconocidos como prácticas válidas por la psiquiatría y en algunos países están prohibidos y son perseguidos con multas, cárcel y pérdida de la licencia profesional.
A las personas que descubren tener una identidad sexogenérica distinta a la heterosexual encuentran diversos grupos y formas de apoyo para conocer su sexualidad, por ser un grupo vulnerable en que la idea de soledad e incomprensión los puede hacer más propensos al uso de drogas, el suicidio y entrar a prácticas de riesgo sexual en busca de su aceptación, además de caer en manos de supuestas terapias de reorientación que han demostrado ser ineficaces y propiciadoras de depresión y suicidio.
Las Jornadas de Orientación y apoyo a la Diversidad Sexual nacieron a partir de campañas en escuelas, centros de trabajo y oficinas públicas como una forma de mostrar apoyo y dar educación sobre diversidad a la población en general, ayudando a crear un ambiente preparado a aceptar la Diversidad y eliminar la discriminación.
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